Despierta... no es real

 


Mis sueños, son la única protección que tengo, ante la caída inminente a la oscuridad. Últimamente es lo que mejor me sale, soñar mientras duermo, si...

todo el día. Es un mecanismo de supervivencia innato, que tenemos cuando nacemos. Una forma de protegernos de esa realidad, que no queremos afrontar. Nos refugiamos en ellos, y dejamos que nos anestesie con sus imágenes. Mostrándonos mundos que no podemos ver, cosas que deseamos, pero no podemos hacer. Nos deja conquistar miedos, que inhiben nuestra personalidad. 

Tengo tantas fantasías por cumplir, y en los sueños lo puedo lograr. Encontrar la paz en los brazos de alguien que me ame. Poder hablar sin miedo, mientras cuento mis historias. 

Volar entre las nubes, observando a esas increíbles personitas, que habitan este mundo. 

No tengo que tomar más pastillas, puedo ser libre por un rato. 

Volver a ver a mis seres queridos, que ya no están... y tanto extraño. 

Dicen, que cuando tu alma se eleva, en el momento que estas lista, para dejar este mundo. Entras en un sueño eterno. Una idea de lo más boyante. 

Despierta, despierta... no existe... no es real. 

Que día de mierda.





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