Lu
Hoy debería ser el día más feliz de mi vida, la noticia más hermosa por fin llego. Lágrimas de dicha por todo mi rostro, no podía parar de felicitarte, como te amo Lu. Estoy tan contenta que me pase todo el día, pensando todas las cosas que podría hacer con esa pequeña criaturita. Que loco... ¿Tan grandes estamos? ¿Tan rápido paso el tiempo?... Y por fin te llego, como te llenaría de besos...
Hoy deje salir un montón de cosas, la forma en la que te amo, es casi imposible de escribirla o expresarla físicamente. No estaría acá, si no fuera por vos, mi guardiana y compañera incondicional. Me diste un hogar con tu familia, cuando era solo una nena que empezaba su adolescencia. Me salvaste de quedarme sin nada, siento que te debo todo lo bueno que alguna vez me paso. No puedo imaginarme un día sin vos, me ayudas hasta en lo más estúpido, como comprarme caramelos en el kiosko, por mis miedos tan extremos al contacto humano.
No entiendo porque no me soltaste la mano hasta ahora, pero es demasiado obvio, sentís el mismo amor hacia mí, que yo hacía vos. Me gustaría prometerte que voy a devolverte todo algún día, pero mis promesas dependen de mis estados y tienen muy poco valor. Cuanto lo siento, por ser así, me gustaría regalarte una mejor amiga, una con la que puedas contar cuando te hace falta. Lu... veo tus ojos, y dicen algo muy diferente a lo que sale por tu boca... lo se hermosa, me porto muy mal, y respondo de formas hirientes.
Vos me salvaste la vida una vez ¿Por qué?... Me hiciste prometerte, nada de cagadas por un año, y lo hice... cuando esa promesa llego a su fin, casi vuelvo a complicarte la existencia, de la peor forma. No sé bien que sentir... es como si mi intención fuera derramar amor hacia vos y los demás, pero termina mutando en una especie de veneno toxico. Como si fuera una flor hermosa, pero extremadamente ponzoñosa.
Hoy tuviste tanta razón al cortarme el teléfono, se suponía que era una noticia para celebrar y lo fue por unos minutos. Luego me termine alterando, como siempre hago, y destruí ese momento. Que hija de puta soy... ¿Como voy a decir semejante barbaridad? Poniéndome a mí, en el centro del escenario, cuando eras vos la dueña de la función.
Me dio tanto miedo, por eso lo solté de esa forma, y era algo real y verdadero. Tenes tu vida, ya es hora que me sueltes un poco la mano. No tengo ganas de amargar más tu vida, tus ojos no mienten. Y está bien que así sea, estamos grandes ya, y no debes cargar con responsabilidades que no son tuyas. Obvio que me vas a perdonar, tantas cosas malas hice en mi vida, pero decirte esto es más una verdad dura de aceptar, que algo negativo.
Si... tengo envidia, algo que pudiste lograr y yo no puedo, a esta altura tampoco quiero. Sería un desastre y poco responsable de mi parte.
Estoy muy feliz.
...“¿Nunca voy a tener hijos”... jajajajajajaajajajajajaaj... Boludaaa que sos, mírate ahora. Como te amo loca de mierda, sos lo más importante que tengo en esta vida.
Aaaaah... a veces te siento tan lejos, maduraste a una mujer hermosa y responsable. Mientras yo, me quede en el tiempo, allá por el 2007. Creo que eso me hace una buena niñera.