Secretos
Una semana difícil, cargada de cuestionamientos y deseos poco joviales, por lo menos, para los que no entienden.
Dia tras día, voy muriendo de a poquito. La depresión va ganando cada vez mas terreno, ahogando lo que una vez fui.
Sigo manteniendo, que desde noviembre me siento así, como si ya no importara nada, estoy ciegamente entregada a lo que tenga que ser. Simplemente, no tengo ganas de volver a reiniciar el contador.
Todo el día es lo mismo, me quedo inmóvil mirando una pantalla, imaginando cosas irreales hasta que caigo dormida en la cama. El sentimiento de extrañamiento, es demasiado fuerte y no lo puedo controlar mas.
Cada vez hablo menos, para mi, perdió el sentido ya. Hay veces que me gustaría quedarme muda, para toda la vida, seria mucho mas fácil que tener que estar explicando una y otra vez lo mismo. Tengo demasiados secretos guardados dentro mío, cosas que me pasaron y nadie sabe, cosas que... me moldearon de esta forma. Que terrible es guardar todo esto, no lo puedo contar, y me gustaría que un día dejara de pesarme tanto. Necesito llorar mucho y que alguien me acompañe, pero no puedo dejar salir estas historias. Por suerte, gran parte de ellas están escritas, ocultas para los ojos ajenos, mi hermoso diario donde fui capaz de abrir mi corazón, y dejar salir toda la oscuridad.
Hace unos días, escribí sobre mi Mamá, y ese pensamiento no me dejo tranquila durante todo este tiempo ¿Como seria mi vida con ella a mi lado?... una pregunta bastante precaria, pero con infinidad de respuestas. Deberías estar acá, ayudándome, no entiendo porque...
Estoy cansada de ser tan inútil, cualquier objetivo a corto plazo que busco, fallo... Soy incompetente en todo lo que hago. No puedo encontrar algo, que me haga levantarme de la cama... Algo... crear algo, lo que sea, hasta un avioncito de papel que pueda volar, tan solo con eso me conformo.
Hay una persona que me acompaño toda la vida, la semana pasada hablamos y todo desencadeno en un ataque de histeria y descontrol. Un momento de mierda, si... uno mas... me dolió en el alma, esas palabras que salieron de tu boca, fueron devastadoras. Me había preparado hace mucho, para esto, siempre intente culparme a mi misma, porque es obvio que esta cuenta, debo pagarla. Pero es difícil, pensé que convencerme durante años, de ser una mala influencia, harían que todo se facilitara... No... duele, un montón, la verdad siempre llega. Me hago la fuerte, pero no puedo lidiar con la verdad cuando me la dicen sin anestesia, me hago mil pedazos.
Hoy, en medio de un videojuego, casi se me escapa una verdad, estuve a punto de largar un secreto. Todo mi sistema de defensa colapso, esa persona me hizo una pregunta tan simple... casi... fui fuerte.
“No es tu culpa”, Hoy, esa frase me salvo, llego en el momento mas oportuno. Ooooh... esas marcas, nos las puedo seguir viendo, están ahí, como si fueran una quemadura alrededor de mi cuello, quiero arrancármelas.